Anhelo la suavidad de tus dedos,
como respondes a mi llamada,
como respondes a mi llamada,
como gimes un lamento
cuando te apreto con rabia.
cuando te apreto con rabia.
Tu sonido me seduce,
tu dulzura que me embriaga,
tu dulzura que me embriaga,
tu quietud y tu tormento
hechizan las notas agrias,
hechizan las notas agrias,
que salen de tu garganta
cuando la sordina acalla.
cuando la sordina acalla.
Tiempo a que no te oigo,
tiempo lleno de añoranzas,
tiempo lleno de añoranzas,
sumido en las sombras mueres
esperando con certeza
que vuelvan a mi las ganas,
de rodearte con mis brazos
de tocarte con mi alma.
Quejido de un niño triste,
sonrisa de una muchacha,
risas y algarabía,
llanto y deseperanza.
esperando con certeza
que vuelvan a mi las ganas,
de rodearte con mis brazos
de tocarte con mi alma.
Quejido de un niño triste,
sonrisa de una muchacha,
risas y algarabía,
llanto y deseperanza.
4 comentarios:
un placer visitarte!
Recibe un relajante y cálido abrazo
Beatriz
Él también lo desea,
él también lo anhela,
pero la confunsión le perturba,
y no se atreve a llorar.
De su boca sólo salen acerbas palabras hacia tí,
Como dardos envenenados,
de ira y rabia contenida,
pues se siente abandonado,
por aquél quien fuese su referente equivocado.
Ese niño triste,
más temprano que tarde,
se dará cuenta de su craso error,
y volverá corriendo a ti para que le extiendas tus brazos,
y tocarte tu alma con su corazón herido.
Espero, de corazón, que se dé cuenta y actúe cuando ya no sea demasiado tarde.
Un beso.
Mimosa ¡¡¡Somos Campeones!!! Pese a todo, los últimos minutos fueron muy sufridos.
Gracias por su felicitación Saludos
Es muy bueno.
Sip.
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